domingo, 24 de junio de 2012

CONTRA EL VIDRIO


 Los carteles anunciaban bellas mujeres disponibles: rubias gigantescas de piel de mantequilla nórdica. Decidí entrar, pero en lugar de caer en esa resbaladera de mullida carne, fui recibido con un botellazo en la cabeza. Ahora me levanto con cefalea dentro de una habitación de paredes de vidrio. Y no solo estoy encerrado, también me han inmovilizado; algún líquido impide mis movimientos para que les sea más fácil… violarme.

Según lo que oigo, he sido elegido entre muchos como el más fuerte, el más apto, el de mejor genética para cruzarme con una vieja de cincuenta años.  ¡Me compraron por unos cuantos euros!

El tipo de la bata blanca se acerca con una jeringa; lucho contra esa fuerza absorbente que me arrastra. Sin embargo, al final soy sumergido entre las ondas del óvulo de esa mujer horrible que no ha encontrado un espermatozoide que le haga el favor de dejarla embarazada. 

Autor: Patricia Mejías@

País: Costa Rica

7 comentarios:

Sara Lew dijo...

Genial. Un beso.

Javier Ximens dijo...

Muy bueno, Patricia, el primer micro te que leo. Besos,terrazeros ( si eres quien sospecho, si no , tambien)

josé manuel ortiz soto dijo...

Por un momento me recordò Con las mujeres no hay manera, de Boris Vian.

Saludos.

MA dijo...

¡Pero que le cuesta al hombre dejarla embarazada, si es un momentín!

Elysa dijo...

Muy divertido, Patricia, terrible destino el de este espermatozoide, jajaja.

Me alegra encontrarte por aquí en versión micro.

Besitos

Sandra Montelpare dijo...

Muy bueno, Patricia. Ah si ese espermatozoide hubiera podido elegir... pero fue al revés. Saludos vendavaleros!

Sandra Montelpare dijo...

Muy bueno, Patricia. Ah si ese espermatozoide hubiera podido elegir... pero fue al revés. Saludos vendavaleros!